viernes, 19 de diciembre de 2008

Matanzas



Tuvimos suerte y haciendo autostop nos paró, al límite de la desesperación, un taxista que nos llevó a Varadero, con parada incluida en la casa de sus primos para tomar agua de coco.
Sí, hemos estado en Varadero, pero sólo fue de paso para llegar a Matanzas; nada de hoteles, ni compras, ni consumismo.
Matanzas ciudad de los puentes. Sin la tristeza de Matanzas no existiría Varadero.
Ciudad que hay que ver desde lo alto para descubrir sus encantos.
Tuvimos al casero menos honrado y más ruidosos del viaje y descubrimos a un descendiente de Zamora (Trefacio) que nos dio la visión del disidente (su hijo es preso político).

No hay comentarios: